Cuando la vida te presente razones para llorar, demuéstrale que tienes mil y una razones para reír.

Uno en la infancia siempre desea estar solo sin que algún padre le diga que hacer, pero cuando un padre o una madre, te llama la atención no es porque te quiere y se preocupa por ti, y lo hace porque te quiere, personal mente pienso que fui afortunado al tener una madre así, no me importan los obsequios materiales que la mayoría de los padres suele darle a sus hijos yo me conforma en la forma que mi Mamá me demuestra su amor.

 “La persona feliz jamás se afana por poseer mucho, disfruta plenamente de lo que tiene, en calidad no en cantidad.”